domingo, 13 de noviembre de 2011

La gallina Caponata

Me encantaría tener un perro, pero de momento no puedo, así que esta tarde he decidido adoptar a Caponata, una gallina que vigilará la entrada de  casa y a la que enseñaré a ladrar con paciencia. Lo único que me ha pedido a cambio es que deje de decir "me importa un huevo", una frase abolida de mi lenguaje a partir de este momento ;-)

Bromas aparte, os dejo aquí un vídeo donde Esperanza (cómo no, jejeje) explica cómo aterrizó Caponata en mi vida. Podréis observar que ha sufrido diversas mutaciones, pero a su favor diré que mis manos optaron por la improvisación ganchillera cuando la conexión a Tubeyou falló.


Bienvenida, Caponata.

2 comentarios:

misperendengues dijo...

Ultimamente yo les tengo un poco de perceguera a las gallinas, pero ésta tuya me gusta mucho, así que os adoptaría como vecinas, jeje... Sin ver el vídeo ya se me ocurre cómo hacerla. Wenas noches. Muakas. (Uy, si tenemos una conversación pendiente!)

ñ dijo...

Seríamos unas vecinas estupendas, la verdad... Ella Caponata y yo Turuleta jejeje Para qué queremos más! ;-)

Esa frase de autodidacta "mi guzta". A ver si algún día yo consigo tejer algo sin la ayuda de Esperanza: ¡todo un reto! De momento me dedico a la improvisación ganchillera cuando el vídeo se rebela, y bueno, Caponata está contenta :-)