viernes, 31 de mayo de 2013

Miau!


Iba a ser un marciano, pero me puse a tejer y al final cobró vida -tenía personalidad su lana- convirtiéndose en un gato. Me queda la duda de si es un gato galáctico o terrestre, pero lo que está claro es que maúlla ;)

Enzo


Siempre me cuesta más hacer camisetas para niños que para niñas: flores, mariposas, mariquitas... ¿Pero qué le tejo a un niño? Noelia, una compi de trabajo, me inspiró y, desde que ramoneé esta camiseta para su hijo, no dejan de llegarme ideas...

Corazones


He aquí una camisetilla para una peque que celebrará pronto su primer año :)

sábado, 30 de marzo de 2013

Little Bird


La he tenido que doblar, ya que, de lo larga que es, no cabía en la fotografía. Será porque es para un largo: dos metros diez, creo recordar (si algún día lee esto, me dirá: "Pero qué dices, exagerá..."). Le llamo en broma little bird: porque es grande como él mismo, de altura y de corazón, y porque le encanta observar con sus prismáticos a esos pájaros que surcan los cielos. También le gustan las estrellas -añadí una de colofón-, y últimamente vive entre letras, libro eléctronico en acción. Así que, éste es mi regalo de cumpleaños para que disfrute lecturas y siestas :)

¿La manta? Muy facilita: puntos altos, poco más, y aprovechando al máximo cada ovillo (si se me acaba antes de terminar una línea, lo empalmo con otro y continúo tejiendo -ya elaboré otra de este tipo-). ¿El resultado? Una manta sencilla y hermosa a la vez.

Tree of love

En la primavera renace todo. Incluso los corazones, como en este árbol del amor, Tree of love, que diseñé para una peque de tres meses.

Noa

Noa es el nombre de la hija de un compañero de trabajo, y he aquí la camiseta que inspiró su compañía en mi mente.

lunes, 18 de marzo de 2013

Renata


Cada manta tiene su historia. Ésta se llama Renata y nació a orillas del mar, acariciada por la brisa de ese Mediterráneo que habla.

Le decía a la tejedora que disfrutara la calma, esa paz que hechiza sus dedos cuando acarician la lana.

Su mente deja de viajar entonces y se concentra en crear, hermanando con su ganchillo puntos altos, bajos, medios, cuya unidad toma forma y se convierte en regalo.

Renata es imperfecta: a veces se bambolea, o eso dice mi abuela, la Ganchillera Real. Pero es fiel y cariñosa, buena manta, amiga de siestas, y sobre todo de sueños, arropados con sonrisas.

Tiene ganas de conoceros y de daros un abrazo. Hoy de hecho preguntó, cuándo se iba a la isla: "Mañana, Renata, mañana...", contesté mientras la envolvía, y ella me dio dos besos y dijo que ya escribiría. "Pórtate bien, Renata -susurré con una sonrisa-, y dale un abrazo a todos, de parte de la Noemita."