lunes, 5 de diciembre de 2011

De Trapilhos a Bufandas Circulares

Últimamente nos reunimos los viernes: unas con las agujas, otras con el ganchillo y otras que, como yo, dudan entre puntos altos y trocitos de bizcocho. Conversamos, reímos y a veces permitimos que el silencio se una al club dejándolo tejer un rato. Entre manos, varios proyectos, por no hablar de los miles que rondan por nuestras cabezas...



Vero y yo andamos con el Trapilho o, para que nos entendamos, Trapillo, una técnica que consiste en tejer con tirelas o madejas elaboradas con excedentes de las fábricas téxtiles de Portugal. Yessi, que ya es toda una experta (ha tejido zapatillas, bolsos y mochilas), trata de enseñarnos con paciencia y, aunque parezca sencillo, cuesta cogerle el truco al ganchillo gigante (va a ser que el tamaño sí que importa en este caso ;-).  Os dejo aquí un vídeo en el que nos enseñan a hacer una alfombra de trapilho por si le queréis echar un ojo o poneros manos a la obra, quién sabe:



Otros retos nos llegan de la mano de Rossanna, que no para de tejer y de sorprendernos con sus creaciones: bufandas circulares, triangulares y una gran destreza que tienta a nuestros ganchillos acompañada de su sonrisa. He aquí un vídeo que nos ha enviado a todas para que nos inspiremos y hagamos los deberes:


Y ahí seguimos, compartiendo tardes ganchillo en mano y abriendo puertas a todas aquellas (aún no ha aterrizado ningún hombre en nuestro clan) a las que les apetezca aprender (de momento tenemos dos nuevas compañeras que se pelean con cadenetas,  puntos bajos y puntos altos) o, por supuesto, enseñarnos.

Se me olvidaba añadir que el otro día me atreví a contarles un cuento: ando dándole vueltas desde hace tiempo a trabajarme el valor y saltar al escenario, aunque sea en un salón entre amig@s, a darle vida a esas letras que emanan de mi cabeza (este mes hay un Festival de Cuentacuentos aquí en Rivas al que me gustaría presentarme si mi acojone me lo permite). A pesar de la confianza que las ganchilleras me brindan, se me puso un nudito en el estómago y, de vez en cuando, se me trababa la lengua a ritmo de ésta mi primera fábula en vivo y en directo: "Cacafuti".

2 comentarios:

misperendengues dijo...

Ay, chama, que tú puedes, que eres una gran contadora de historias. Así que trapilho... eso no lo conocía. Yo tengo ganas de hacer un cuello (o bufanda circular), pero tengo visto un chal al que le pega una lana que vi (un poco cara) que creo que pifiaré no tardando mucho. Y por cierto, tengo que ponerte deberes...

ñ dijo...

¿Deberes? Pues pónmelos, chama, pónmelos... Hoy he retomado las dos agujas y me he puesto como meta tejer un jersey... Ya te contaré... Cuento con la ventaja de tener a la mia mamma como asesora, así que supongo que a algún sitio llegaré... Besiños gordiños